Desde los principios de la historia, se ha descubierto que el ser humano siempre ha estado en búsqueda del saber, para poder resolver problemas que nos atañen. Bien es el caso del calentamiento global, una problemática que durante años nos ha estado picando las narices, y que, si no se resuelve de una vez por todas, no habrá otra oportunidad.
Con la nueva etapa de la Cuarta Revolución Industrial, la cantidad de soluciones para el problema anterior cada vez va en aumento, tal es el caso de los vehículos autónomos. Con la obra titulada “¿Pueden los vehículos autónomos reducir los efectos de invernadero?” se abre esta posibilidad, dentro de este estudio, se toman de ejemplo grandes corporaciones como Google, BMW, Daimler, Ford entre otras marcas internacionales que están luchando por resolver este problema.
Te podrás preguntar ¿Qué tienen que ver los autos autónomos con la contaminación? ¿No sería mejor concentrarnos en los autos con energías renovables? La respuesta simple es, sí, es posible, sin embargo, es necesario estudiar otras áreas e incorporarlas para poder sumar las posibilidades de éxito.
Dentro de este estudio, de los puntos más interesantes, son los resultados, tomando los escenarios más positivos en los cuales los carros autónomos fueran utilizados en gran medida, se considera que la tasa de consumo de gasolina podría reducirse en un 45%, en el lado más pesimista, al menos un 30%.
Las variables independientes de este porcentaje son la agilización de conducción en las calles, un menor tiempo de uso del motor, un manejo más inteligente de los arranques y frenados, el evitamiento de choques, entre otros factores.
Sin embargo, una desventaja en la interpretación de estos datos es la gran variabilidad dentro los escenarios, por lo tanto, la cantidad de estudios sólidos es muy reducida, y no la suficiente para convencer totalmente a una empresa para crear este tipo de productos.
En conclusión, esta obra nos da una extensa visión acerca de las problemáticas y posibilidades de atacar un problema tan grande como lo es el calentamiento global, en este caso es un problema que nos concierne a todos, y por lo mismo, la única manera de resolverlo es entendiéndolo.
Alejandro Acosta Murillo, estudiante de IMT.